Desde el yoga facial a los ejercicios Kegel, pasando por el ciclismo. Poner el cuerpo en movimiento te ayuda a atajar inconvenientes propios del paso de los años.
Desde el yoga facial a los ejercicios Kegel, pasando por el ciclismo. Poner el cuerpo en movimiento te ayuda a atajar inconvenientes propios del paso
de los años.
Para lucir tu mejor cara
¿Quieres que tu rostro continúe resplandeciendo? Además de emplear las cremas y tratamientos adecuados, te recomendamos apuntarte a una disciplina
divertida y con resultados más que demostrados: el yoga facial. Si eres constante, una serie de ejercicios te ayudarán a tonificar la piel del rostro,
luchar contra la flacidez, mejorar la mirada cansada o a eliminar pequeñas arrugas y huellas de estrés, incluso en la frente. Propónselo a tus amigas; si
montáis sesiones en grupo, además, lo pasaréis genial.
Para fortalecer el suelo pélvico
A partir de los cincuenta resulta casi imprescindible ejercitar los músculos del suelo pélvico con el fin de prevenir o luchar contra posibles pérdidas de
orina. Si tienes hijos, igual ya conoces los ejercicios Kegel de la recuperación postparto. Se trata de una práctica sencilla que puedes realizar en casi
cualquier momento del día: sentada o tumbada, conduciendo, hablando por teléfono o viendo televisión. Empezarás a notar sus efectos a partir de las cuatro
o seis semanas. Te recomendamos ser persistente pero tampoco pasarse, los especialistas aseguran que el exceso puede llegar a ser contraproducente.Puedes descargártelos aquí.
Para seguir confiando en ti misma
La práctica de cualquier ejercicio físico te ayuda, sin duda, a seguir confiando en ti misma; en tu cuerpo y en tu capacidad de continuar planteándote
metas, además de contribuir, seguramente, a ampliar tu círculo de amistades. Desde el aeróbic al ciclismo -el de montaña tiene cada vez más adeptas-, el
senderismo, el pádel o la natación. Tanto si ya los practicabas como si te decides a empezar ahora, tus músculos ganarán firmeza y aumentarás tu fondo
físico. Pero también estarás encantada con tu fuerza de voluntad y las endorfinas segregadas te harán sentir genial, aunque tardes un poco más en
recuperarte del esfuerzo. Lo importante es que no te pongas ningún límite antes de empezar, sigue leyendo aquí.